UN BILLETE SENSACIONAL

Anverso del billete de 100 rublos

Como habréis podido comprobar los que de vez en cuando entráis por aquí, siento una cierta debilidad por la numismática rusa. Desde hace algún tiempo me llaman la atención los billetes rusos de principios del siglo XX, tanto por su considerable tamaño como por sus excepcionales diseños. El billete que presento hoy es, en mi opinión, el más bonito que he podido encontrar hasta la fecha. Más que un billete se puede decir que es una obra de arte cartográfica, un verdadero atlas del Cáucaso. Si además sois aficionados a la geografía esta maravilla no  puede faltar en vuestra colección.

Reverso del mismo billete



Se trata del billete de 100 rublos de 1918 que muestra la ruta ferroviaria de Rostov a Baku vía Vladikavkaz, en el sur de Rusia. El anverso presenta una locomotora de la época y el reverso muestra un mapa del Cáucaso, rodeado por los mares Negro y Caspio, indicando el itinerario de esta línea férrea. No es mucho lo que he podido averiguar acerca de este billete, pero parece ser que se trataba de préstamos emitidos por la propia Compañía de Ferrocarriles de Vladikavkaz al 5,4 % de interés (si ampliamos el anverso del billete podemos ver esta cifra) con el fin de autofinanciarse. Si alguno de los que me leéis podéis aportar más información, no hace falta decir que será muy bienvenida.

Pero hay algo más que me llama la atención. Es bien sabido que la época en la que se emitieron estos billetes era especialmente convulsa. En 1917 Rusia estaba enfrentándose a una situación de guerra contra los llamados Imperios Centrales que había generado un enorme coste económico y social. A las penurias que tradicionalmente la población rusa debía soportar ahora se añadía la de costear una guerra que no hacía más que encadenar fracasos estrepitosos. La Revolución de Febrero de 1917 depuso a la dinastía Romanov (después de dirigir los destinos de Rusia durante tres siglos) y conformó un gobierno provisional y un incipiente estado democrático que se derrumbó unos meses después, en parte por el empeño de las autoridades en mantener la participación de Rusia en la I Guerra Mundial. La Revolución de Octubre de 1917 elevó a los bolcheviques al poder, lo cual fue contestado rápidamente por fuerzas contrarrevolucionarias, tanto de manera interna (el Ejército Blanco) como externas (Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos, que se resistían a perder a Rusia como aliado frente a Alemania). Al final, pese a que el gobierno bolchevique firmara la paz con Alemania y sus aliados a principios de 1918, se vio obligado a hacer frente a una cruenta guerra civil que duraría varios años.



Detalle del mapa en el anverso con la línea férrea
Rostov-Baku

En tiempos de guerra o revolución lo habitual es que la emisión de billetes o monedas se “simplifique”, es decir, que se renuncie a la belleza estética en favor del pragmatismo. En este sentido, el papel moneda de una economía en guerra suele prescindir enteramente de todo tipo de adornos o diseños complicados, ya que no es el momento indicado para ocuparse de esos asuntos. Pues bien, hoy tengo el honor de presentaros aquí la excepción a esa norma.

Y con este sensacional billete, me despido por unos cuantos días. A todos los que me leéis, o entráis por aquí de vez en cuando, os deseo un muy feliz verano. ¡Hasta pronto!

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http://www.monografias.com/trabajos6/reru/reru.shtml

 

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