CUENTAS DE BAMBÚ
No quisiera despedir el año sin dedicar un espacio a una de las formas de dinero de necesidad que más me ha llamado la atención estos últimos años, y que por desgracia no he podido añadir aún a mi colección: las cuentas o tokens de bambú (tally sticks) del sur de China, puestas en circulación a finales del siglo XIX y principios del XX para suplir la falta de circulante en ciertas zonas del declinante imperio de la dinastía Qing.
El XIX no es un siglo precisamente bien recordado por el pueblo chino. Las llamadas guerras del opio contra Gran Bretaña convirtieron a China en un protectorado comercial de facto, al verse obligada a firmar una serie de tratados desde una posición de desventaja que abrían sus puertos al antojo de los occidentales (algunos, como Hong Kong, pasaban a convertirse directamente en posesiones extranjeras), llegando incluso a ejercer la potestad de extraterritorialidad sobre territorio chino. El descontento social favoreció el auge de sectas y sociedades secretas de tal manera que una de ellas, la conocida como Taiping (que curiosamente se traduce como "Gran Paz"), consiguió mantener en jaque a las autoridades de Beijing durante más de una década. Entre 1851 y 1864 tuvo bajo su control grandes zonas costeras del sureste como la provincia de Jiangsu, lo que incluía importantes centros urbanos y comerciales como Nanjing y Shanghai pero también del interior como Anhui, Hubei, Jiangxi y más al norte Shangdong, llegando en algún momento a amenazar al mismo Beijing.
Jiangsu, tradicionalmente una de las zonas más prósperas del país, quedó sumida en la más profunda depresión económica a mediados de siglo tras varias décadas de ser el escenario de diferentes conflictos. Uno de los sectores más afectados fue el del circulante de cobre, ya que durante la época Taiping no se había apenas emitido, y el existente se encontraba muy deteriorado. Campesinos, pequeños comerciantes y los consumidores en general lo demandaban, ya que los fondos disponibles consistían principalmente en plata depositada en bancos chinos y extranjeros de Shanghai, un material con un valor demasiado elevado para su uso cotidiano. Podía pasar tiempo hasta que las populares monedas cash volvieran al mercado en grandes cantidades, por lo que hacía falta una solución urgente.
Y esa solución vino de estas atractivas cuentas de bambú, ideadas y puestas en marcha por comerciantes locales. Según F. Thierry, los primeros tokens fueron emitidos por un banco local en la ciudad de Wuxi cerca de Shanghai alrededor de 1870, algo que pronto fue imitado por otros negocios como empresas productoras de diferentes bienes, hostelería y tiendas locales. Se trataba de pequeños comercios que consiguieron acordar con los campesinos el pago de las materias primas y productos agrícolas que necesitaban con estos tokens, redimibles en moneda de cobre. Estos, a su vez, eran utilizados por los propios campesinos y la población local en general para la compra de bienes y servicios en todos aquellos establecimientos que los aceptaran. Esta aceptación fue alta, y aunque por lo general las cuentas de bambú no circulaban más allá de los alrededores de los comercios emisores, su uso se extendió a otras provincias cercanas como Hubei o Shangdong.
¿Cómo eran físicamente las cuentas de bambú? Como podemos ver en las imágenes, consistían en pequeñas barras de alrededor de 90 mm de largo, 12 mm de ancho y 6 mm de grosor. Tras retirar la capa exterior del bambú, se cortaba en estas tiras rectangulares y se taladraba un pequeño agujero en la parte superior, con una muesca adyacente. Una vez preparada la barrita, se procedía a esculpir o dibujar las inscripciones a ambos lados, normalmente consistentes en:
- Anverso: valor facial en la parte superior, nombre del comercio emisor en la inferior, siempre impresos o esculpidos en el bambú.
- Reverso: fecha de emisión de acuerdo con el calendario lunar en la parte superior, número de serie en la parte central, escritos con tinta. En la parte inferior, esculpido en el bambú, el nombre de la localidad.
- Canto: normalmente, escrito con tinta, el aviso shi qu bu gua (失 去不补), que se traduce como "no se reembolsa en caso de pérdida".
Gran post,las curiosidades del dinero chino siempre sorprenden, buen inicio de año, saludos cordiales José Ramón
ResponderEliminarGracias Adolfo. Tradicionalmente en China la iniciativa privada siempre ha sido relevante a la hora de encontrar soluciones al problema de la escasez de circulante. En casos como este además han dejado verdaderas maravillas estéticas. Un saludo y feliz año, encantado de verte por aquí 😊
EliminarMuy interesantes. Gracias por explicarnos.
ResponderEliminarSiempre un placer :) Muchas gracias, un saludo
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